Te proponemos un camino de conciencia occidental, una práctica meditativa no directiva, que no utiliza la inducción y que no se propone dar instrucciones de cómo tendríamos que respirar o cuál sería la postura correcta o una determinada manera de funcionar sino que facilita experiencias que ayudan a la persona a funcionar con mayor libertad, plenitud y consciencia. Está basada en la confianza de que nuestro organismo posee una tendencia a poner todo en su lugar cuando se le da la más mínima oportunidad.
Durante una sesión semanal de hora y media de Trabajo con el potencial corporal, te iré proponiendo diferentes experimentos y prácticas. Por ejemplo, realizar presiones sobre la fascia y el músculo para liberar tensiones profundas o tirabuzones como el del vídeo para ir despertando la consciencia del movimiento.
Además, trabajarás la coordinación neuromotriz a través del ensayo de patrones inusuales de movimiento, la recuperación de patrones de movimiento propios de la infancia, diferentes movilizaciones articulares, la reprogramación de la micromovilidad y el trabajo con el tono muscular.
Te propondré prácticas respiratorias y daremos mucha importancia a la estimulación de la consciencia ósea para que puedas establecer un contacto no verbal consciente contigo mism@, para que te puedas ir dando cuenta de la relación que tienes con tu cuerpo y con tu entorno y para que puedas ir poniéndole palabras a tu cuerpo habitado si así lo deseas, pues durante la sesión tienes libertad absoluta para expresarte.
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